NOTICIASRESTABLECIENDO EL HONOR Y LA AUTOESTIMA

UN NUEVO FUTURO PARA SUDÁFRICA CON EL CAMINO A LA FELICIDAD

La filial de El Camino a la Felicidad Sudáfrica imparte seminarios a los estudiantes, la policía, los miembros de organizaciones religiosas y la gente de todos los ámbitos de la vida.

La filial de El Camino a la Felicidad Sudáfrica llega a cada nivel de la sociedad, y a cada rincón de su nación para abordar el crimen en ascenso.

Mientras que se han hecho avances, Sudáfrica sigue luchando con su reputación como una de las capitales del crimen. En el 2017, el índice de criminalidad cayó un 1.8 %, pero no todos los tipos de crimen disminuyeron. Asesinato, por ejemplo, está en ascenso por el 5 año consecutivo, con un promedio de 52 asesinatos al día.

Pero la filial de El Camino a la Felicidad Sudáfrica, dirigida por Heidi Wolfaardt, sabe el remedio: El Camino a la Felicidad (TWTH). Su equipo lanzó un esfuerzo para alcanzar cada sector de la sociedad sudafricana con los 21 preceptos.

Debido a que la policía trata con el problema de la criminalidad en todas sus formas, son un foco importante de formación. Por ejemplo, una presentación al comandante de la comisaría de policía de Sunnyside en Pretoria resultó en una asociación que comenzó con el entrenamiento de 100 oficiales. El entrenamiento se hizo con la Comisaría de Parkview en Johannesburgo, así como con los jóvenes del foro de la policía comunitaria para el comisaría de policía de Katlehong.

Un oficial, Hermanus “Spook” van der Berg, nombrado como un miembro principal de la policía nacional, vio el valor de El Camino a la Felicidad. Organizó el entrenamiento de sus propios oficiales y la entrega de El Camino a la Felicidad en tres escuelas en el Municipio Olievenhoutbosch. El jefe de la División de Prevención de Delitos Sociales en la comisaría Bramley —quién sabe que la criminalidad tiene relación con las drogas y la pobreza—, asistió a un taller de El Camino a la Felicidad. Luego trajo con él a miembros de organizaciones de la comunidad al siguiente taller que se ocupa de las drogas y la pobreza.

Asociaciones formadas con fundaciones de todo el país que ahora incorporan El Camino a la Felicidad en su trabajo. Está el Orlando Children’s Home (Casa de Niños de Orlando) en Soweto, que educa a sus niños sobre los preceptos. La ONG Cambio de la Mente ha hecho conferencias de El Camino a la Felicidad como parte de sus actividades sociales en la Escuela Primaria Bertrams. En Ciudad del Cabo, la Fundación para un Cambio Positivo ha adoptado el librito para su trabajo con la gente que se recupera del abuso de drogas y alcohol, incluyendo antiguos miembros de pandillas.

El Camino a la Felicidad no es religioso, sin embargo, le habla a cualquier persona de cualquier fe. Los Ministros por lo tanto lo encuentran como un recurso para sus feligreses. Por ejemplo, el Pastor Shadrak inspiró a otros 30 pastores a entregar seminarios de El Camino a la Felicidad. El Líder Nacional de la Iglesia Vuvu Kane de Sudáfrica, después de ser introducido al programa, hizo que dos de sus obispos y varios jóvenes líderes de la iglesia se entrenaran para entregar el programa.

No hay ninguna esquina de Sudáfrica demasiado distante o demasiado pequeña para mejorar las vidas de alguien a través de la guía moral de El Camino a la Felicidad.

Se llevaron a cabo eventos en un día especial para llegar aún más lejos. Esto incluye la distribución del librito en el Día de Mandela, una celebración en honor del ex Presidente Nelson Mandela, así como la distribución durante el Día de la Libertad, que celebra el día de las primeras elecciones democráticas y cuando Mandela se convirtió en presidente.

Pero sin importar el número de seminarios, la única forma de asegurarse de que cada rincón de la nación es alcanzado, es a través de los medios. Así entrevistas con los 21 preceptos fueron hechas en Mams radio FM, una estación en el Municipio Mamelodi. Otra en UJFM alcanzó a más de 55 000 personas, mientras que otra en VOW FM alcanzó a 35 000 oyentes.

Soweto TV transmitió los anuncios de servicio público de El Camino a la Felicidad a 70 000 personas y la SABC 1 reprodujo cada precepto a lo largo del Sur de África y a otras naciones africanas.

No hay ninguna esquina de Sudáfrica demasiado distante o demasiado pequeña para mejorar las vidas de alguien a través de la guía moral de El Camino a la Felicidad. Y el equipo de El Camino a la Felicidad continua con sus acciones efectivas ya que su objetivo es asegurarse de que han llegado a cada sudafricano con su mensaje.



RESTAURANDO LOS VALORES MORALES

La Fundación de El Camino a la Felicidad Internacional trabaja para revertir la decadencia moral de la sociedad restableciendo la confianza y la honestidad, por medio de una amplia distribución de los 21 preceptos. Las donaciones apoyan la producción y distribución del librito de El Camino a la Felicidad y del material del plan de estudios.